Cada gota de tiempo
de pasa por mi pensamiento,
se desliza y limpia mi corazon sediento,
Y ese rocio llevado por el viento, se llama Tu.
Cada pecado mostrado,
y que me hace postrarme ante Dios, humillado,
me atrae magneticamente a tu lado;
y ese iman tan valorado, se llama Tu.
Cometo el error de comparar
de mis ojos y mi carne, me dejo llevar.
Pero cuando veo la verdad, y me dejo llevar;
me lleno de un gran amar, y se llama Tu.
Me regocijo de que mi carne muera,
y que recuerde sus ojos como aquella vez primera.
Me alegro de que eres diferente a cualquiera,
Y que esa pasion morena, se llama Tu.
Le pido a Dios que me cambie,
que muera a mi mismo y poder enterrarme.
Y a Su Imagen poder renovarme,
Y al final poder casarme, con una princesa llamada TU.
