La demencia destruye la clemencia.
Mediaticamente destruye mis ojos.
Me quita esperanza y destruye mi paciencia.
Constancia? Solo DIOS me la puede dar.
La ignorancia destruye la belleza.
Primeramente mi cerebro,
me muestra los placeres de la vida,
transladandome directo a los pies de Cancerbero.
La carencia destruye la pureza.
Me rodea la inmundicia.
Piedras de tropiezo son sembradas
en el campo de la vida.
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