Savior I come
Quiet my soul remember
Redemption's hill
Where Your blood was spilled
For my ransom
Everything I once held dear
I count it all as lost
Lead Me To The Cross.-Hillsong United.
Asi mismo como me perdone, tengo que seguir
dejando atras cosas.
No
es cuestión de excusas. No es cuestión de que es difícil. Es que es una
PROPOSICION personal.
Es
una DECISION! No un deseo, o una corazonada. Es una DECISION. Una PROPOSICION
de dejarlo todo atrás.
Así
deje mi país. Con una mentalidad extraña, pero al mismo tiempo caótica. Mis
deseos eran el placer carnal, la fiesta y la bebida. Y los encontré! Tuve
mujeres, lindas, feas. Con dinero, sin dinero. Bebí mucho. Me "divertí".
Y me deje llevar de ese vacío y lo llene con cosas que no tenía que llenarlo. Y
caí. Toque fondo. Lo peor como se puede sentir un hombre, así me sentí. Estaba
perdido. Perdido en mi propio interior. Y llore. Llore como nunca había llorado
en años. Llore como nunca creí que lloraría. Los hombres también lloran. Y
suplique a cada persona a mi alrededor, por ayuda. Recuerdo bien, el pedir
ayuda, que me socorrieran a personas como yo; con sus problemas y temores al
igual que yo. Una noche de Diciembre el Señor nació en mi interior. Recibí la unción
del Espíritu Santo en mi interior. Como lo sé? Sencillo. Ese momento cuando al
orar, y dar gracias a Dios por tu vida, te sientes en paz. Esa es la única
palabra. Pero no esa paz temporaria que ganamos al conseguir algún logro sin
necesidad. Paz. Me sentí perdonado. Amado. Abrazado. Que algo me levantaba por
sobre mis rodillas. Y solo di gracias. Di las gracias como nunca había
agradecido a mi Dios por todo lo que ha hecho en mi vida.
Ese
día acepte al Señor Jesús en mi corazón. Mis peticiones de cada día son que
siempre este ahí conmigo; que mi fe nunca desvanezca, que sienta ese fuego en
mi interior al hablar de Él, al orar, al hablar con Él. Que si ve en mi corazón
una acción hipócrita para con El; que me advierta y me castigue. Y que cada día
que pase, se haga Su voluntad, no la mía. Y que Su voluntad la vea reflejada
cada día en todo lo que haga. Las tentaciones siguen ahí. Ya que salí de un
ambiente medio malo para un joven que solo quiere cosas buenas en su vida;
aunque se desvíe solo por diversión. El alcohol y el sexo, la pornografía no lo
es todo. Luchar por los sueños, ver cada día a quien puedes ayudar, a quien
brindarle una sonrisa, a quien ofrecerle tu mano, a quien ofrecerle tu apoyo
moral...Esas son cosas mejores y más dignas que las anteriormente mencionadas
arriba. De esas cosas salí. Y a esas cosas NUNCA MÁS quiero volver. Quiero volver a ser el mismo chico de antes.........
Gran
error. Nunca pidas volver a ser el de antes...Porque sabes que siendo el de
antes, volverás a hacer las cosas que te hicieron caer ayer. Quiero volver a
ser el chico sonriente y de sonrisa alegre. No el chico que se creía el rey del
mundo, ni el chico que se creía que era el "gran seductor"; sabiendo
bien que solo era un payaso. Dios perdono mis pecados, porque decidí el mejor
camino. Que era salir del pecado en sí; y seguir a Jesús. Pero el otro paso era
conmigo. Tenía que perdonarme a mí mismo primero. Y ha sido difícil. Pero no
imposible. Después de meses y meses de pensar, de asesinarme el corazón una y
otra vez...Pasando por mi cabeza como diapositivas los momentos buenos y malos
del pasado, decidí tomar el paso, y la DESICION de perdonarme. Mirar al pasado
y reírme. Y solo tomar esos recuerdos como memorias que me ayudaran a no volver
a hacer lo mismo en el futuro; no utilizando los recuerdos en mi presente y utilizándolos
directamente para influenciar mi futuro. Ya en mi cabeza no está que bebía. Que
era un muchacho sinvergüenza. En mi cabeza esta que soy un hijo de Dios. En mi
cabeza esta que mis pecados fueron perdonados. En mi cabeza esta que la lucha
contra las tentaciones es una lucha de todos los días; y que se gana de
rodillas. Y por supuesto, dejándote llevar por los consejos de Dios. Y esos
consejos están en su Palabra.
Creo
que continuare luego. No quisiera aburrirlos...Bendiciones a cualquiera que lea
esto.
Querido hermano Gabriel,
ReplyDeletePara mi ha sido un regalo del Señor leer estas palabras que expresas en tu blog, donde se evidencia el glorioso encuentro que has tenido con el precioso Salvador... Para mí ha sido un aliento de recordar que la salvación es un regalo, y su perdón es un regalo aunque no lo merezca, y esas mismas luchas que tienes la tenemos todos, pero existe una preciosa promesa de que nada nos separará de su AMOR.
Sigamos clamando para que el Señor ponga mas fuego en nuestros corazones por Él y por las cosas celestiales en medio de este mundo que nos asedia para volver a atrás.
Dios te siga bendiciendo.
Atte Sebastián Gómez (Colombia)